Este hito es posible gracias al respaldo de la Universidad de Sevilla y la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ETSI), que apoyan al equipo en su formación técnica y en el desarrollo de aeronaves experimentales.
Con 600.000 euros, la región se sitúa por encima de la media española en cuanto a financiación colectiva según un informe realizado por Lendix