No poder sembrar nada o casi nada este año, tras sembrar un 30% en 2022 y un 50% en 2021, repercute en el ecosistema de las marismas de Doñana y, especialmente, en su población de aves y fauna de la zona.
El comité de empresa ha pedido explicaciones a la dirección del centro porque "son demasiados días con esta situación y en unas circunstancias de altas temperaturas en las que las personas trabajadoras incluso están teniendo que ir a por agua para los pacientes cuando se encuentran solos".