La Semana Santa entra en el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla

El Colegio de Farmacéuticos de Sevilla ha acogido la celebración de su VI Pregón de Semana Santa, que este año ha sido ofrecido por el farmacéutico Joaquín Casati Amarillas, mayordomo 1º de la Hermanad de Santa Marta y que fue presentado por un antiguo hermano mayor de esta corporación, José Joaquín Gómez González, pregonero de la Semana Santa de Sevilla en 1982.

A lo largo de su disertación, Casati Amarillas ha realizado un recorrido por los pasajes de la Pasión de Cristo retratados en distintas cofradías de la Semana Santa hispalense, una "catequesis en la calle", como el mismo orador ha citado. "La representación de la Pasión en la calle nos ayuda a comprender la actitud de Cristo y su entrega, a valorar su amor por todos los hombres", ha expuesto, indicando asimismo que "hablar de la Pasión de Cristo según Sevilla es hablar de la muerte y de la vida. De la muerte de Jesús que es la que se representa en las imágenes objeto de nuestra devoción en sus distintas advocaciones y de la vida como triunfo sobre la muerte, que es la base de nuestra religión y fundamento de nuestra Fe".

Junto a las distintas advocaciones cristíferas citadas a lo largo de su pregón, Casati ha incluido también una referencia a una imagen mariana de la ciudad, la Esperanza Macarena, a la que ha dedicado unas de las pocas líneas de versos que contenía su texto, que se ha configurado esencialmente a través de la prosa.

Reseñables también han sido las líneas dedicadas al Gran Poder así como al Cristo del Calvario, protagonista de un poema con el que ha retratado uno de los puntos culminantes de la Pasión de Cristo y a cuya cofradía también pertenece el pregonero.

El epílogo de su pregón ha estado reservado a su Hermandad de Santa Marta, y en especial a su titular, el Cristo de la Caridad, de cuya advocación se ha servido para hablar de la caridad como "la virtud por la cual amamos a Dios sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros mismos por amor a Dios" y como "vínculo de la perfección y el fundamento de todas las virtudes", culminando con un romance alusivo a la Resurrección del Señor.