El Sevilla vuelve al liderato de la Liga

Queda mucho para decir que el Sevilla F. C. puede optar al título de LaLiga Santander, pero a los seguidores sevillistas que le quiten lo bailado. Líder en solitario cuando se cumple el primer tercio de campeonato. Casi nada. Además lo hace con un juego coral en el que todos cumplen su rol, defensa férrea y ataque certero que, al menos en Nervión, donde no ha perdido, es infalible. Quinta victoria consecutiva en el ¨sanchez Pizjuán, esta vez por 1 a 0, y pasando apuros en la parte final, pero quién dijo que fuera fácil.

Puede parecer exageración, pero la victoria de ayer tiene valor por el rival que tenía en frente. Era el Real Valladolid. Pero tal y como está LaLiga, el conjunto dirigido por Sergio es un hueso. Alta intensidad, velocidad en las transciones, defensa férrea... Esto se encontró el equipo de Machín enfrente en una tarde lluviosa donde las únicas novedades en el equipo de gala sevillista fue la entrada de Aleix VIdal por el lesionado Navas y de Roque Mesa por Mudo Vázquez, al que apenas le dio tiempo a entrenar por su comparecencia con argentina.

Pocas ocasiones en los primeros minutos donde la intensidad de ambos equipos se imponía al juego. El Valladolid lo intentaba pero arriba tenía muchos problemas para inquietar a Vacklic. Por contra, el Sevilla no conectaba con sus medios y se limitaba a jugar en largo, con aperturas a bandas bien cerradas por su rival. Transcurrido el ecuador del primer periodo, comenzó la fase dominadora del Sevilla, que le dio para crear 3 ocasiones, de las cuales convirtió la más clara. Jugada en banda de Sarabia, que se zafa de su rival para sacar un centro preciso al área pequeña donde Silva rompía su racha sin marcar con un cabezazo ajustado al palo.

El gol sentó mal al Valladolid, que tuvo momentos de zozobra con pérdidas de balón que pudo costarle caro, pero el Sevilla no aprovechó este momento y a punto estuvo de pagarlo caro en la segunda parte. Al descanso, delirio en las gradas.

La segunda parte comenzó como terminó la primera. Dominio sevillista que poco a poco fue sacudiéndose el Valladolid. En estos minutos, el portero vallisoletano Masip salvó a su equipo con dos paradones, uno a tiro de Sarabia y otro a cabezado de André Silva. Pero los cambios, con la entrada del delantero Enes Unal, mejoró a un Valladolid que comenzó a llegar al área sevillista con asiduidad. Tanto que un remate acrobático del turco acabó en gol anulado por entender que Toni Villa, en fuera de juego posicional, molestaba al portero sevillistas.

Los últimos minutos fueron de agobio para los locales con llegadas de Verde y Unal en las que Vacklic se convirtió en héroe con dos auténticos paradores, especialmente al turco en el último minuto. El Sevilla no fue capaz en estos minutos de aprovechar los espacios y se limitaba a dejar pasar los minutos. Quizás el único punto negro de una noche en la que volvió al liderato.

El tiempo dirá si esta posición es anecdótica y da para soñar con gestas impensables.