​Arranca la Escuela de Verano de Bormujos con más de 150 alumnos

|

Fichas plastificadas, arco de desinfección y dispensadores en todas las aulas para garantizar la protección sanitaria en esta iniciativa dirigida a facilitar la conciliación familiar y laboral


Escuela verano bormujos

La Escuela de Verano de Bormujos ha echado a andar con gran éxito de participación y todas las medidas de seguridad y protección sanitaria para evitar posibles contagios. Más de 150 niños y niñas, de los que unos 30 son adolescentes, disfrutan de actividades lúdicas y educativas durante toda la mañana, permitiendo así a la conciliación laboral y familiar en muchos hogares.

El alcalde, Francisco Molina, y la delegada de Educación, Carmen Garfia, han visitado hoy las instalaciones de la Escuela Municipal de Música y Danza donde se ubica la Escuela de Verano. Aunque en años anteriores se utilizaban sólo el 50% de las aulas, este verano las clases se han repartido por todo el edificio, para permitir un número más reducido de menores y mayor separación entre ellos.

El alcalde ha destacado la importancia de "ofrecer este servicio esencial a las familias para el cuidado de los menores, ya que con ello se les facilite la vuelta a la normalidad". Una prestación que se ha dudado en prestar "lo que ha supuesto un esfuerzo al tener que duplicar medios materiales y humanos, pero que garantiza la seguridad de nuestros menores".

Para garantizar la protección total se han plastificado todas las fichas y juegos elaborados por las propias monitoras, de manera que sea posible su desinfección una vez que finalice la jornada. Además se han instalado dispensadores de gel hidroalcohólico por todas las aulas y pasillos, con objeto de que la limpieza de manos se realice de forma continua. Se reparten mascarillas y se está instalando ya un arco desinfectante por el que podrán pasar niños y mayores.

A la entrada del edificio hay termómetros para tomar la temperatura y desinfectantes, así como cartelería distribuida por todas las puertas para recordar las medidas de precaución. Gracias a ello hasta los más pequeños están ya concienciados sobre la forma de actuar.

Una de las habitaciones ha quedado reservada para que, en caso de que alguno de los alumnos/as o monitores se sintiera indispuesto y se tuviera sospecha de que podría ser el COVID_19, quedara aislado hasta su traslado al médico.

A la Escuela de Verano se han apuntado 150 menores para el mes de julio, aunque las inscripciones siguen llegando. Como novedad este año se ha abierto el cupo para adolescentes, entre los que se encuentran algunos de los participantes en diversos programas sociales.

Desde las 8:30 de la mañana, los pequeños realizan juegos, cantan, pintan, bailan y desarrollan actividades educativas. Además tienen la oportunidad de refrescarse con otras iniciativas acuáticas a lo largo de su estancia.

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.