La zapata de la calle Betis refuerza su seguridad

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Una joven polaca falleció en noviembre de 2014 tras caer desde el poyete mientras tomaba una fotografía.


Barandilla betis

La instalación de una barandilla a lo largo de la zapata de la calle Betis ha comenzado este jueves, por motivos de seguridad tras la muerte el pasado mes de noviembre de una joven polaca que se precipitó desde la misma cuando tomaba una fotografía. Según ha detallado el concejal de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, el proyecto finalizará en varias semanas y se cerrará con un presupuesto superior a los 30.000 euros.


"La intervención viene a reforzar la seguridad a raíz de un desgraciado accidente que ocurrió el año pasado y que este Gobierno ha querido solventar en la medida de sus posibilidades y lo más pronto posible", ha manifestado Muñoz.


Por su parte, un técnico ha explicado que el proyecto consiste en vallar un tramo de 370 metros de longitud dividido en cuatro tramos, para lo que se aplicarán dos tipologías de barandilla, ya que hay tres tramos en los que la cota disponible del banco de la zapata es de 65 centímetros y uno en el que hay 25 centímetros de alto, aunque en todos los casos el poyete y la barandilla sumarán 1,10 metros de altura.


DICTAMEN FAVORABLE DE LA COMISIÓN DE PATRIMONIO


El proyecto, según ha asegurado Muñoz, cuenta con el dictamen favorable de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, por tanto, "nada impedía ya la ejecución del proyecto con el que se aprueba una asignatura que estaba pendiente en materia de seguridad, en materia de adecentar esta arteria principal del barrio de Triana".


Asimismo, el portavoz del Gobierno municipal ha incidido en que el anterior alcalde, Juan Ignacio Zoido (PP), "dijo que poco se podía hacer en materia de seguridad puesto que es una zona calificada como Bien de Interés Cultural (BIC) y que eso era una restricción a cualquier intervención". En este sentido, ha apostillado que "afortunadamente ahora ha tenido el visto bueno de Patrimonio", en referencia a la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, que según el Ayuntamiento ha autorizado a todos los efectos la intervención.


"Desgraciadamente, tuvo que ocurrir un fallecimiento de una chica extranjera para que se desencadenara toda esta reflexión que finalmente, ha acabado con la ejecución de este proyecto, que es una solución, aunque eso no quiere decir que no puedan ocurrir otros accidentes, pero está claro que a partir de ahora la seguridad de los visitantes de esta calle es mayor".


INTEGRACIÓN EN EL ENTORNO


En cuanto al diseño de la barandilla, tanto el portavoz del Gobierno municipal como el director técnico han manifestado que "se le hace un guiño al puente de Triana incluyendo los aros del mismo para integrarlo mejor en el entorno". La actuación "cuenta con el visto bueno de la Comisión Provincial de Patrimonio", que en su autorización habría incluido sugerencias en materia de armonización con el entorno histórico, por lo que el Ayuntamiento puede seguir estudiando opciones para que la barandilla esté "mejor contextualizada".


En cuanto al azulejo con el lema 'Triana' que el anterior Gobierno municipal del PP quería colocar en la zapata, el delegado ha declarado a los periodistas que "habrá que colocarlo en algún sitio que no suponga ningún atentado patrimonial".


El portavoz del Gobierno municipal ha anunciado, asimismo, la intención de abrir el Muelle Camaronero, un área verde en el tramo de Betis próximo al Puente de San Telmo, que "lleva años cerrada y sin inaugurar". Muñoz ha considerado que el establecimiento hostelero previsto en el proyecto inicial no puede ser condición 'sine qua non' para que este "privilegiado mirador" pueda ponerse en valor y abrirse, pues, como paseo.

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