Sevilla tenía un sueño... Y Sevilla se despeinó

Más de 40.000 personas se dieron cita en el Estadio de La Cartuja en un concierto donde no faltó el espectáculo de luces y artistas de primera mano. 

Alejandro Sanz no quería defraudar y no lo hizo. El pasado sábado cerró su gira 'Sirope' en el Estadio de La Cartuja frente a 40.000 personas que ansiaban escuchar lo nuevo del artista.

Alejandro Sanz quiere a Sevilla y ese amor es recíproco. Y eso no se puede disimular. Desde el momento en que pone el pie en el escenario la relación entre Alejandro y su público va más a allá que la de un simple artista que hace un concierto más. Tras las actuación de los teloneros un enorme cronómetro indicaba que el espectáculo estaba a punto de empezar. El público gritaba, quizás para ver si los números corrían más de la cuenta, hasta que aparecieron los primeros acordes de 'El silencio de los cuervos'. El concierto había empezado y Sevilla se rindió. El espectáculo venía acompañado de un decorado lleno de luz y color realizado por Luis Pastor. 

La noche no hacía más que empezar. Las nuevas canciones como 'No madura el coco', 'Un zombie a la intemperie', 'A mí no me importa' o la entrañable 'Capitán Tapón' estuvieron presentes, pero Alejandro Sanz no puede olvidar su pasado. Y su público no quiere olvidarlo. Por eso no podía dejar atrás temas como 'No es lo mismo', 'Desde Cuando', 'Quisiera Ser', que interpretó junto a Vanesa Martín, o 'Looking for Paradise', de la mano de una de sus coristas.

El artistas de raíces andaluzas venía cargado de sorpresas entre las que se encontraban José Mercé y La Flaka, con el clásico 'Corazón Partío', o India Martínez que interpretó 'A que no me dejas'. Aunque en varios momentos hizo el amago de despedirse, Sevilla sabía que había carrete pa largo.

Cuando hay un piano en un concierto de Alejandro Sanz sus fans ya saben lo que significa. Con una luz que sólo le enfocaba a él llegaron los primeros acordes. El público quería acompañarle pero hizo un esfuerzo para que cantara solo. Era el momento de '¿Lo ves?' Pero Alejandro fue generoso y dio paso a su público. Un público entregado que cantaba una estrofa de la canción. Ahora sí, Sevilla estaba con él, y él con Sevilla. Y la luna... Una luna que le había costado su esfuerzo ponerla ahí, decía bromeando. Esa cita que anunciaba horas antes en Twitter estaba en su mejor momento.

Y uno de los momentos más emocionantes fue el medley que interpretó junto a un verdadero espectáculo de imágenes en el que no faltaron 'Amiga mía', 'Mi soledad y yo' o 'Y si fuera ella'.

Alejandro Sanz se había guardado lo mejor para el final. La gira 'Sirope' venía con una gran sorpresa y es que el artista rescató del cajón dos de las canciones que en su día dieron mucho que hablar, 'Viviendo Deprisa' y 'Pisando Fuerte'. Ahora sí, el espectáculo estaba llegando al final. Él de "chico tenía un sueño... y ese sueño era estar aquí con vosotros". Gracias por todo.