Música y gastronomía protagonistas del éxito de la V Edición del Tomate Blues

Buena música, buena gastronomía y mejor ambiente se dieron cita en la V edición del Festival Tomate Blues organizado por el Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca en colaboración con la Asociación Cultural Tomate Blues. El Parque de los Hermanamientos aglutinó a varias generaciones, familias completas, de aficionados a la música negra, desplazados desde muchos rincones de Andalucía y atraídos por un evento que gana adeptos cada año, por su buena organización y la calidad de los grupos y artistas que componen el cartel y que siempre despierta el interés del público.

Más de diez horas de música en directo de cinco bandas arropadas por miles de aficionados desde que, al filo de las cuatro de la tarde, hiciera su aparición Little Boy Quique y sus sonidos del Delta. Antes fue el tiempo de la gastronomía local con la degustación de uno de los productos estrella de Los Palacios, el sabroso “bombón colorao”, servido en fritá y en aliño.

Juan Murube Flamenco Swing puso el acento local con su música fusión y compartió escenario con la polifacética Esther Weekes, cantante de jazz y blues que se desenvuelve también como bailaora de flamenco. Después Nacho Collado Group deleitó a los asistentes con una extensa actuación y su extraordinaria guitarra. La dinámica banda bilbaína Travellin' Brothers de estilo neo swing aunó, en esta ocasión, sus raíces afroamericanas con la voz y el acordeón del noruego JT Lauritsen. Pusieron el broche oro pasada la medianoche, el guitarrista fundador del grupo M-Clan, Santi Campillo, y Pepe Bao, uno de los mejores bajistas españoles de la historia, en un evento presentado por el especialista musical y locutor de radio Francisco Ángel Rivera.

Pero además, el Festival tuvo una repercusión positiva en el desarrollo local, especialmente en materia de turismo y restauración. En este sentido, el delegado municipal de Turismo y Desarrollo Económico del consistorio palaciego, Manuel Carvajal, destacó que el Tomate Blues se consolida como reclamo turístico para el municipio, “no en vano la ocupación hostelera del fin de semana ha superado el 65% y la notable afluencia de público que atrae el Festival, no sólo de la provincia sino de toda Andalucía, puede incrementar además la clientela de bares y restaurantes palaciegos”.

Tomate y blues, gastronomía y música pero también convivencia, amistad, naturaleza, reencuentro y descubrimiento, todo ello en Los Placios y en un Festival que se supera cada año.