​Más de 400 escolares palaciegos participan en la Romería Infantil en honor a San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza

Tras el acto ha quedado inaugurada la gran carpa donde se encuentran expuestas las 30 carrozas de papelillos que formarán parte del cortejo este domingo hasta el Parque Periurbano de la Corchuela

Casi medio millar de niñas y niños de todos los centros educativos de Los Palacios y Villafranca han participado en una nueva edición de la Romería Infantil en honor a San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, como preámbulo de la que se celebrará este domingo 14 de mayo en honor a los santos labradores.

Alegría y emoción en las caras de los pequeños perfectamente ataviados que acudían, como si de hermandades filiales se tratara, hasta las plantas de los santos que los esperaban en el altar efímero de la Parroquia de Santa María la Blanca. Cada colegio con su estandarte hacía entrada en el templo parroquial y los niños y profesores han protagonizado la tradicional ofrenda de alimentos para Cáritas y una representación de alumnos realizaron sus peticiones.

Ha sido, el director Espiritual de la Hermandad y Párroco de Santa María la Blanca, Diego Pérez Ojeda, el encargado de explicar a los pequeños la historia de San Isidro y Santa María de la Cabeza, una familia humilde y trabajadora, y de gran calado en un pueblo donde la agricultura tiene una gran importancia como es Los Palacios y Villafranca.

Tras el acto celebrado en la parroquia, al que asistía el delegado municipal de Festejos, Juan Manuel Bernal, y de Vías Públicas, Irene García, además de Dolores Murube, hermana mayor de la corporación de los santos labradores, la alegre comitiva de romeros y romeras, encabezada por el estandarte de la Hermandad de San Isidro Labrador, iniciaba su particular peregrinación hacia el Parque de las Marismas cantando y bailando. Los pequeños, además, han portado también en andas las imágenes del patrón de los agricultores y de su esposa, Santa María de la Cabeza. Durante el recorrido los participantes han dejado estampas de gran colorido y alegría por las distintas calles de la localidad.

Ya en el Parque de las Marismas, una vez presentes todos los grupos participantes de los diferentes colegios palaciegos, se ha hecho un pasillo para la entrada de los santos labradores. A continuación, con todo perfectamente organizado, los peregrinos pudieron disfrutar de un desayuno saludable y de una auténtica jornada de convivencia romera.

Tanto padres, madres como profesores han destacado la buena organización de esta iniciativa que sirve para inculcar la cultura y tradiciones palaciegas en los más pequeños.

Tanto la hermana Mayor de San Isidro, Dolores Murube, como el delegado de Festejos, Juan Manuel Bernal, se mostraron satisfechos del transcurso de la jornada.

Para Bernal Cecilia, "ver la ilusión y la sonrisa en la cara de los niños en este día tan especial es muy bonito. Lo que hacemos con este acto es intentar fomentar nuestra romería, queremos que siga creciendo y, junto con la Hermandad no cesamos de trabajar en ese objetivo". El delegado destacó también el amplio dispositivo que que pone en marcha el Ayuntamiento con motivo de la Romería, "para las más de 5.000 personas que participan activamente en la misma: unas 30 galeras, más de 160 charrets, caballistas, peregrinos que hacen el camino andando o personas que se desplazan hasta La Corchuela a pasar el día".

Con la Romería Infantil quedó inaugurada la gran carpa donde se encuentran expuestas las 30 carrozas de papelillos que formarán parte del cortejo este domingo hasta el Parque Periurbano de la Corchuela. Durante estos días la visitaran diferentes colegios y mañana viernes se desarrollará una convivencia para que la ciudadanía pueda participar activamente de una fiesta como la Romería en honor a San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza, declarada de Interés Turístico de Andalucía.

La Romería de Los Palacios y Villafranca tendrá lugar este domingo 14 de mayo y contará, como es habitual, con un amplio dispositivo de seguridad y emergencias para velar por el buen desarrollo del evento y por la integridad de las personas y animales que participan en el mismo.