Coke y el Sevilla se despiden

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Coke

El Director Deportivo, jugadores de la plantilla y los trofeos de la Europa League ganadas, acompañaron a Jorge Andujar 'Coke' en su despedida del Sevilla tras su reciente fichaje por el Schalke 04. Un acto sencillo pero emotivo que ha servido para que el jugador madrileño se despida del club, compañeros y afición con los que ha convivido durante los últimos cinco años.


Comenzaba el acto Monchi que, visiblemente emocionado, develaba un mensaje que le había enviado a Coke hace unos días, en los que reconocía que su traspaso al Schalke 04 no fue de su agrado. "he vendido a muchos jugadores y muchas de esas ventas me han generado muchas dudas, no sabía si iban a salir bien o mal. Sin embargo creo que en esta operación siento que algo no ha va bien, tengo un mal sabor de boca desde ayer, porque pienso que perdemos algo más que un jugador, un capitán… Gracias por todo y mucha suerte en tu nueva etapa, amigo".


Tras esto cedió la palabra a Coke que comenzó "agradeciendo a Monchi, a la familia Del Nido y al presidente, José Castro, por darme la oportunidad hace cinco años de vestir esta camiseta y tener el orgullo de defenderla durante cinco temporadas, en las cuales he vivido cosas que de pequeño pensaba que nunca iba a vivir en el mundo del fútbol".


En el repaso a su lustro como sevillista habló de la ciudad e incluso de la rivalidad futbolística. "De Sevilla me quedo con su gente y con su pasión. Con el sabor de unos caracoles con una cerveza helada rodeado de mi gente. Con su Feria y con mi playa de Zahara de los Atunes. Con el color rojo hasta la médula, aunque el verde siempre me ha tratado con mucho respeto. Con mi calle Regina y con alguien que entró en mi vida y espero que no se vaya jamás", refiriéndose a su pareja.


Cada vez más emocionado, el futbolista comenzó a hablar del club recordando "el templo, nuestro templo, el Ramón Sánchez-Pizjuán. Muchas gracias a todos los sevillistas por hacerme vivir noches inolvidables". Después pasó a hablar de los entrenadores que lo han tenido a sus ordenes, desde Marcelino a Sampaoli, con una parada en Unai Emery y su equipo que para Coke "nos hicieron creer que éramos invencibles". En su repaso tuvo palabras para todos los empleados del club, con mención especial a los utilleros, Pichón y Lito, y al delegado, Martagón.


Sobre sus "compañeros de batalla", como les llamó, tuvo palabras de agradecimientos por "hacerme mejor futbolista y mejor persona; por vivir todos los días en un sitio donde ha reinado el compañerismo y la honestidad. Hemos tocado la gloria saliendo siempre desde el barro, peleando con sudor, lágrimas y nuestro corazón por nuestro amigo de al lado como hermanos, con unos valores que me gustaría inculcar a mis hijos… No dejéis que eso desaparezca de este vestuario", solicitó.


Las últimas palabras que logró articular fueron ""Lejos, pero con mi camiseta roja y blanca siempre debajo. Animando a mi Sevilla, que para mí es un privilegio. Bendito fútbol, muchas gracias y ¡viva el Sevilla!" como colofón a una despedida rumbo a Alemania.

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