Tomares contará con el Consejo Municipal de la Infancia y Adolescencia

El Ayuntamiento va a poner en marcha el Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia, cuyo pleno constitutivo será el próximo 22 de noviembre. Un órgano consultivo y de participación infantil en el que los niños y adolescentes de Tomares podrán exponer los temas que les preocupan, proponer ideas y ofrecer su opinión no sólo en relación con temas vinculados con la infancia y la adolescencia, sino también sobre las cuestiones del municipio que les aporten beneficios y contribuyan a mejorar su calidad de vida.

Con esta nueva iniciativa, el Ayuntamiento de Tomares da un paso más en pro de los derechos del niño, creando este nuevo órgano hasta ahora inexistente en el municipio, con el objetivo de obtener en 2018 el reconocimiento oficial de UNICEF de Tomares “Ciudad Amiga de la Infancia”, por su apuesta decidida a favor de los derechos del niño y cumplir con los principios de la Convención sobre los Derechos del Niño, un sello que hasta ahora solo ostentan 170 municipios de España.

Con ello Tomares se suma al artículo 12 de la Convención de los Derechos del Niño, que determina que “los Estados tienen la obligación de garantizar al niño/a que esté en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar su opinión libremente en todos los asuntos que le conciernen, teniéndose debidamente en cuenta las opiniones del niño/a, en función de su edad y madurez. Con tal fin, se dará en particular al niño oportunidad de ser escuchado, en todo procedimiento judicial o administrativo que afecte al niño, ya sea directamente o por medio de un representante o de un órgano apropiado, en consonancia con las normas de procedimiento de la ley nacional”.

El Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia se reunirá una vez cada seis meses, y estará constituido por 36 niños y adolescentes de 3º a 6º de Primaria (8-12 años) y de 1º a 4º de ESO (12-16 años) de todos los colegios e institutos de Tomares, que representarán a todos los alumnos y se renovarán cada dos años; un representante de los padres de alumnos y un representante del profesorado de cada centro.

A través de este órgano, los representantes de los alumnos se harán eco de las necesidades, sugerencias, ideas, propuestas y opiniones de cada uno de los niños de cada colegio, en relación con los asuntos que consideren importantes para su municipio, para luego trasladarlas al Ayuntamiento, quien se encargará de satisfacer sus demandas a fin de aumentar su bienestar y calidad de vida.

Con este nuevo órgano, los niños y adolescentes se convertirán en consejeros que enriquecerán con sus aportaciones, puntos de vista y sugerencias, la gestión de la ciudad. “La idea es promover la participación de la ciudadanía infantil y adolescente en los asuntos municipales que les afecten, a fin de que podamos tener en cuenta las opiniones e iniciativas de la infancia, sus necesidades y garantizar su bienestar”, explica la concejal de Bienestar Social, Igualdad y Familia, Mª Carmen Ortiz.

La experiencia confirma que los niños y niñas que asiduamente son consultados/as y participan activamente en la toma de decisiones en las instituciones por las que circulan socialmente, también se hacen más responsables. Así, entendemos la participación como el ejercicio de un derecho y también de responsabilidades. La participación como una escuela práctica de responsabilización de la infancia, como un instrumento educativo y de desarrollo esencial que va a favorecer la identificación del niño y adolescente como ciudadano, siendo una herramienta fundamental en su proceso de formación y desarrollo.