El Sevilla gana hasta en los días malos

Definitivamente el Sevilla F. C. se ha acostumbrado a ganar. No hay otra forma de explicar la victoria sevillista en el campo del colista Osasuna tras un gris encuentro en el que consiguieron además remontar por dos veces un marcador adverso. Estas victorias son las que consigue un equipo grande en sus malos días: dosis de suerte en momentos puntuales, pegada arriba, ayuda arbitral,... Sin embargo, nada de ello debe quitar mérito al conjunto sevillista en una temporada que apunta alto. Sin embargo, no conviene olvidar conceptos y repasar situaciones negativas que se dieron en el partido y que ante otro rival con más calidad, seguramente hubieran causado más daño.

Y es que el juego que le gusta pregonar a Sampaoli no se vió por ningún lado. Quizás por el estado del terreno de juego, duro e irregular a causa del frío, junto a la entidad del contricante, hizo que el entrenador eligiera una forma más prosáica de jugar. Así, el pelotazo desde atrás fue la única forma para sacar el balón o, al menos, la más cómoda, justo lo contrario que se debería hacer ante un conjunto tan necesidado como este Osasuna que arriba tiene algún que otro recurso interesante, como el exbético Sergio León, autor del primer gol.

Con una defensa de tres con Mercado, Pareja, Ramí, los carrileros de siempre Mariano y Escudero, Iborra como pareja de Nzonzi y Mudo Vázquez enlazando con Jovetic y Ben Yedder, el Sevilla tenia poca salida de balón.

El castigo llegó en forma de gol en una jugada de saque de banda mal defendida por Ramí que se quitó para evitar el córner en un centro lateral y que Sergio León se adelantó a Mercado en el primer palo. El Sevilla quedó grogui y el castigo pudo ser mayor si no es por Sergio Rico que salvó el segundo con un paradón al delantero osasunista tras un córner. Sin embargo, la calidad define siempre y tras un par de pelirgosos acercamientos, Iborra lanza un empalme en el borde del área, el balón se estrelló en el poste, pero Jovetic recogió el rechace y lo cede al propio Iborra para que remache. Empate y gol psicológico ya que fue la última jugada de la primera parte..

Sin embargo, no era el día del Sevilla. Intentarón los jugadores salir tocando y a las primeras de cambio un error en la entrega de Ramó le pudo costar caro al Sevilla de haber estado más acertado Roberto Torres. No obstante, tanto va el cántaro a la fuente que de nuevo se adelantó el conjunto rojillo con gol en propia puerta de Iborra. En ese momento los visitantes dieron un paso adelante y en dos minutos llegó el empate de Iborra. Los jugadores de Osasuna comenzaron a notar la presión de la clasificación y Sampaoli movió ficha con Sarabia por Mercado y defensa de 4.

Comenzó el Sevilla a apretar de verdad y se acercaba con más peligro. Primero un cabezazo de Ramí con paradón del portero osasunista, derivó en córner que acabó en gol del Mudo Vázquez tras hacer una disimulada falta al defensa que lo cubría. Cosas que pasan cuando se enfrenta el segundo y el último clasificado. Con todo a su favor, el Sevilla buscaba la sentencia y la encontró en los pies de Sarabia cuando quedaban minutos para el final. No obstante hubo tiempo para la emoción ya que la relajación sevillista permitió que en el descuento Kodro redujera las ventajas pero la suerte estaba echada.

Cierra el Sevilla una primera vuelta de récord, con 42 puntos y grandes sensaciones a pesar de la eliminación copera. La pregunta es si le dará para llegar a pelear por el título hasta el final. Ilusión no falta.