La mejor defensa de la Liga frena al Sevilla

1 de 6 puntos. Ese es el balance del inicio de la segunda vuelta del Sevilla F. C tras su derrota en el campo del Espanyol la semana pasada y el empate casero de este domingo frente a un villarreal que no es el equipo menos goleado de la competición por casualidad. En un ambiente frío y tenso tras los dimes y diretes del club con los Biris, un Sevilla espeso y falto de puntería desaprovechó varias ocasiones, entre ellas un penalti, aunque hay que admitir la gran actuación del portero visitante, Asenjo, y que el Villarreal tuvo también sus opciones, claras, para dar un susto mayor.

Apostó Sampaoli por los 3 centrales que tan buen rendimiento suele dar, con la novedad de Lenglet como central izquierdo ante la ausencia del sancionado Pareja, y le dió el carril izquierdo al reaparecido Vitolo por la baja de escudero. Los demás, parte del once de gala. Y parece que los locales se contagieron del frío ambiente porque su fútbol de toque y movimiento tuvo una marcha menos en la soleada mañana dominical. Al contrario de partidos anteriores, el Sevilla solo vivió de arreones, que le podían dar para ganar el partido, pero no siempre se puede tener la misma eficacia.

También apareció la figura del árbitro, que no sancionó un penalti parecido al que sentenció al Sevilla la pasada semana en Barcelona, aunque tampoco se puede cargar las tintas contra el trencilla ya que más tarde pitó uno menos claro que desaprovechó Nasri e incluso hubo alguna jugada en área sevillista que pudo acabar en el punto de los 11 metros.

El Sevilla era lo que Nasri quería y solo cuando el balón llegaba a los pies del francés se intuía algo de peligro. Vitolo también fue de lo mejor de los locales con entradas por su banda izquierda donde se volcó el juego sevillista. Pero arriba faltaba movimiento y, por supuesto, acierto. Tuvo conjunto nervionense sus opciones, con un cabezazo de Ben Yedder a bocajarro que paró Asenjo con el pie pero los últimos 15 minutos del primer periodo fue de color amarillo, que gozó de un par de ocasiones muy claras, especialmente un mano a mano de Adrián que se marcho rozando al poste.

Salió el Sevilla impaciente en la segunda parte, sin las ideas claras y queriendo llegar muy rápido a la portería de un ordenado Villarreal. Y a punto estuvo el partido de cambiar con un penalti más buscado por Vitolo que por el defensa que paró un gran Asenjo. Movía el banquillo Sampaoli sin dar con la tecla con la entrada de Sarabia e Iborra. Este último tuvo el gol en un cabezazo que hizo al portero visitante hacer la parada de la jornada. Mientras el Villarreal buscaba la contra con Bakambu en el terreno de juego y a punto estuvo de encontrar permio con un mano a mano que de nuevo Adrián mandó al limbo.

Quizás hizo el Sevilla más merecimiento para la victoria pero se vio falta de chispa con respecto a otros partidos, especialmente como local. Parece que el sueño de pelear por la liga se aleja y el objetivo debe ser mirar a Atlético de Madrid y Real Sociedad por la tercera y cuarta planta.