Aníbal González dentro de Sevilla y ¿fuera de la ciudad?

Se podría decir que Aníbal González-Ossorio es para Sevilla como Gaudí para Barcelona. Es el autor más destacado del movimiento arquitectónico histórico regionalista, cuya consagración como profesional se producirá al ser nombrado arquitecto director para alzar sobre el suelo de Sevilla las edificaciones que albergarían la Exposición Iberoamericana de 1929.

En sus primeros trabajos, por influencia de la escuela de Madrid donde estudió, utilizará el estilo modernista entre 1900 y 1908. A partir de esta fecha tomará una nueva dirección arquitectónica en la que se observará la influencia del historicismo y sus diferentes estilos artísticos en sus construcciones, en las que destacará el estilo neomudéjar hasta el final de su carrera en 1929.

De su etapa modernista en Sevilla podemos destacar varias edificaciones como el Café París, hoy en día desaparecido, construido entre 1904 y 1905, la antigua fábrica de tejidos ubicada en la calle Torneo, realizada entre 1908 y 1909, y la Casa Laureano Montoto, en la calle Alfonso XII, como uno de los edificios más representativos del modernismo de González.

De la etapa regionalista sobresalen construcciones como el Edificio de Manuel Nogueira, ubicado en la céntrica zona de la Campana, construido entre 1907 y 1908. Este edificio fue la primera construcción regionalista del arquitecto, lo que supondrá el abandono del estilo modernista. Le seguirían construcciones como la Casa de los Marqueses de Villamarta, en la avenida de la Constitución, la Capilla de los Luises, en la calle Trajano, la Casa de Luis Prieto, en la calle Cano y Cueto, y la casa de los Medallones, inspirada en la Casa de las Conchas de Salamanca, en la calle Mateos Gago haciendo esquina con la calle Mesón del Moro. Destacan el Museo de Artes y Costumbres, el Pabellón de Bellas Artes, actualmente Museo Arqueológico, el Pabellón de la Asociación Sevillana de la Caridad, en la avenida Reyes Católicos, y la Plaza de España, construida entre los años 1914 y 1928, como las edificaciones anibalístas más representativas de la ciudad.

De entre todos sus proyectos la construcción de la Basílica de la Inmaculada Milagrosa será uno de los más ambiciosos. Esta megalómana basílica, en el terreno que ocupa gran parte del Colegio Portaceli en la actualidad, no llegaría a terminarse debido a la difícil situación socio-política del momento y a que sus notables proporciones constructivas ensombrecerían a las de la Catedral. Estas cuestiones política y simbólica propiciarán fuertes enfrentamientos entre los no partidarios y el arquitecto, quien murió poco después de comenzar su construcción. En la actualidad se pueden observar los robustos cimientos al pasar por los Jardines de la Buhayra y, mucho mejor desde una perspectiva aérea, contemplar la planta en forma de cruz latina si obviamos la existencia de un restaurante en el crucero, el cual resta importancia a la edificación.

En la provincia de Sevilla, fuera de la ciudad, proyectará de varias haciendas en el Aljarafe sevillano, siguiendo la morfología del cortijo andaluz, como la Casa de las Salinas en Castilleja de la Cuesta y varias construcciones civiles en la Vega del Guadalquivir, destacando la Plaza de Abastos de Lora del Río y su posible participación en el diseño de una escuela de tauromaquia, actualmente un restaurante, en la misma localidad sevillana según varios informantes. La influencia de su estilo marcará la dirección de otras muchas construcciones dotándolas de una notable y singular belleza como manifestará la Iglesia de San Fernando, construida sobre una antigua nave industrial en 1924, en el municipio sevillano de Villanueva del Río y Minas, en cuyo proyecto participará junto a José Espiau. También se le considerará como el posible artífice de la Plaza de España de la misma localidad.

En la provincia onubense dejará un importante legado arquitectónico del cual Aracena, donde veraneaba, tendrá el mayor número de edificaciones. En esta localidad proyectará el Casino Arias Montano en 1910, el Ayuntamiento de Santa Catalina, el Lavadero de Fuente del Consejo, realizado entre 1920 y 1926, la entrada a la Gruta de las Maravillas y la Plaza de Abastos. En Jabugo realizará la casa modernista de Tiro Pichón, en Huelva capital la Casa Cristóbal Yuste de 1907, ubicada en la calle Berdigón, en Ayamonte el Paseo de la Ribera y en Isla Cristina la casa Roselló, construida en 1927. En este último municipio continúan apareciendo edificaciones que se le atribuyen al afamado arquitecto, como se hará en 2014 con una casa ubicada en la calle del Prado y fechada en 1925.

En la provincia de Cádiz se encuentran el Edifico Gallo Azul en Jerez de la Frontera, ubicado en la calle larga, y el Hotel de los Marqueses de Villamarta en Sanlúcar de Barrameda. La edificación de este hotel modernista de 1907 será consecuencia del boom turístico que experimentó la localidad gaditana al convertirse en uno de los destinos estivales más importantes de España durante el siglo XX.

También encontramos regionalismo anibalístico en Córdoba, representado por la Casa de Enríquez Barrios, realizada junto al arquitecto Aurelio Gómez, y en la provincia de Málaga, con la Casa de los Serrailler en Antequera, como dos de sus últimas obras, ambas proyectadas en 1928.

Fuera de Andalucía proyectará el Pabellón de la Exposición de Pequeñas Industrias, ubicado en el Parque del Retiro de Madrid, construido en 1902 y en la localidad extremeña de Zafra, ubicada en la calle Gobernador, la denominada como Casa Aníbal González construida varios años después de su muerte, aunque se tienen dudas sobre su autoría.

Con suma seguridad, el trabajo del célebre arquitecto sevillano se prolongará en muchas más edificaciones de las que hoy en día conocemos y gracias a proyectos de divulgación histórico-artísticos como los llevados a cabo por su nieto Aníbal González, con quien casualmente coincidí en Lora del Río mientras documentaba su plaza de Abastos y pude intercambiar información sobre la obra de su abuelo, podremos disfrutar y conocer todas ellas en un futuro para el deleite de la historia del arte y los admiradores del estilo artístico del arquitecto en particular.