El Betis consigue una victoria de peso ante el Milán

No venía haciendo una buena pretemporada el Real Betis Balompié con derrotas dolorosas, empate con equipos de inferior categoría y pocas victorias, a pesar de la ligera mejoría mostrada en los últimos partidos. Sin embargo, el fútbol es caprichoso y en el partido más exigente, ante un AC Milán que se ha gastado 200 millones de euros en fichajes, apareció un equipo serio y competitivo que ganó justamente, por mucho que el VAR hiciera acto de presencia en dos decisiones que beneficiaron al conjunto verdiblanco.

No hay que lanzar las campanas al cielo, al igual que ayer tampoco había que pensar que el equipo no avanza tras la derrota en Córdoba, pero lo cierto es que en el estadio Angelo Massimino de Catania se vio a uno de los mejores Betis de esta pretemporada. Más allá del juego, que no destacó demasiado por su belleza ni por su profundidad (el equipo no tiró entre los tres palos en la primera parte), los verdiblancos destacaron en algo que no habían hecho hasta ahora: orden defensivo, presión e intensidad.

Salió Setién con menos canteranos que en los último partidos y con muchos de los fichajes disponbles en el campo, dando un cariz de seriedad al envite. Y el once compuesto por Dani Giménez, Barragán, Mandi, Feddal, Tosca; Camarasa, De la Hoz, Guardado; Loren, Sergio León y Nahuel respondió.

Aunque es cierto que el Betis en ningún momento pudo desarrollar el juego de toque y posesión que persigue su nuevo técnico, el Milan tampoco se sintió cómodo gracias al trabajo de contención de los heliopolitanos. El partido comenzó incómodo para los verdiblancos que se vieron sorprendidos por la fuerte presión del equipo milanista, que no dejaba sacar el balón jugado desde atrás. Así, en el minuto 10, llegó la primera jugada clave del partido el árbitro con ayuda del VAR un tanto de André Silva por fuera de juego en una falta lateral. Se fue serenando el Betis poco a poco hasta conseguir El mismo protagonista milanista tuvo otra clara al quedarse solo ante Dani Giménez pero Feddal logró cruzarse antes de que lograse disparar. Por parte del equipo sevillano, Mandi estuvo cerca del gol de cabeza pero el marcador no se movió.

El inicio de la segunda parte, con Narváez en el campo, se pareció mucho a la primera. La presión asfixiante del Milán hacia que el Betis apenas generara peligro. Dani Giménez se lucía con un paradón y el equipo pasaba apuros en las jugadas a balón parado, pero aguantaba el envite. Parecía que el equipo italiano estaba más cerca del gol cuando empezó el carrusel de cambios. Precisamente uno de los nuevos, Fabián, abrió el marcador en el minuto 66 con un auténtico golazo tras disparo a la escuadra para alegría de los aficionados béticos que veían posible la victoria. Aunque duró poco la alegria ya que poco después empataba el equipo milanista de penalti comentido por Brasanac. Se animó el partido con los goles y ambos equipos estuvieron cerca del gol. Era un intercambio de golpes, que no movía el marcador hasta que una falta botada por Joaquín, que a punto estuvo de entrar, sirvió para que de nuevo el VAR hiciera justicia al decretar penalti por manos de un jugador de la barrera. Sanabria, que había entrado por Sergio León, marcó desde los 11 metros cuando apenas quedaba tiempo para nada.

Victoria de peso que debe servir para que los jugadores cojan confianza antes del comienzo de liga. Pero antes espera otro rival importante, el Inter de Milán, para cerrar el sábado la pretemporada.