La felicidad se instala en Heliópolis

El Real Betis Balompié finaliza la primera vuelta del campeonato de liga con 27 puntos gracias a la sufrida victoria conseguida en el Benito Villamarín frente al Leganés por 3 a 2 en una noche que terminó en fiesta, ya que además, Rubén Castro, en su vuelta con la elástica verdiblanca, se encargó de materializar el penalti que dio el triunfo a su equipo, que se instala en la séptima plaza. Noche casi redonda para los más de 40.000 aficionados béticos que se dieron cita en la fría noche de lunes en el estadio verdiblanco, con un gran ambiente tras el resultado del derbi.

El entrenador bético, fiel a sus palabras al catalogar de importante y difícil el partido ante los pepineros, puso lo mejor de lo que disponía sobre el terreno de juego ante las bajas que acumula, especialmente en defensa. Así, formó un once con Adán; Francis, Amat, Javi García, Durmisi; Guardado, Fabián; Joaquín, Boudebouz, Tello; y Sergio León. Eso sí, lo que no cambió es su filosofía de juego, basada en la posesión de balón.

Así, salió el Betis con toda la cuerda dado, con presión alta que comenzaba en un luchador Sergio León y ataques largos, masticando la jugada de lado a lado y con mucha participación de Adán. Era un dominio algo ficticio puesto que faltaba velocidad en los últimos metros para ganar profundidad pero al menos no pasaban apuros los verdiblancos frento a un Leganés encerrado y ordenado, que lo fiaba todo a la calidad de Amrabat y la lucha de Guerrero. Sin embargo, después de un par de escarceos que terminaron en nada, se adelantaron los locales en un fallo defensivo del central Dos Santos, que además se lesionó en la misma jugada, al hacerse un lío con el balón frente a la presión de Sergio León que se fue directo a portería en un mano a mano que le ganó el portero pepinero pero a cuyo rechace, muy atento, llegó Tello para llevar el a 0 en el marcador.

Siguió el Betis en plan dominador con llegadas por bandas y acceso a segundas jugadas como demostró un disparo nuevamente de Tello que detuvo el Pichu Cuéllar que estuvo atento a la espalda de sus defensas con dos salidas de riesgo. Cuando parecía que no pasaba nada, els usto lo dio el Leganés en las botas del exbético Brasanac que en un rechace se quedó solo ante Adán que salió bien para desbaratar la ocasión. Los locales seguían a lo suyo, posesiones largas que, sn embargo, contrastaron por la forma en la que llegó el segundo gol. Los madrileños comenzaban a estirarse y adelantar sus líneas de presión y solo fue necesario un pase largo de Adán para que Joaquín con un gran control y una carrera veloz, se plantara ante la portería pepinera para marcar de fuerte chut el segundo de su equipo. Quedaban 5 minutos y parecía que sería la sentencia pero en el último minuto, un fuerte chut de Gumbau se coló como una exhalación tras tocar el poste en la portería del portero verdiblanco. Había partido.

Y vaya si lo hubo. El Betis salió con la misma intención en la segunda parte pero entre que estuvo más impreciso y el lógico cansancio, a lo que hay que sumar el cambio táctico de Garitano que desplazó a Amrabat a la media punta, fue el Leganés el que comenzó asustando con un disparo que detuvo Adán. Sin embargo, pudo sentenciar el Betis en tres acciones casi consecutivas de Sergio León. La primera, tras recibir un genial pase de Guardado que lo dejó solo sin poder superar la salida de Cuéllar. La segunda tras jugada de Tello en la que se entretuvo a la hora de disparar. Y la tercera cuando él mismo debió dar el pase de la muerte a Boudebouz al primer toque pero finalmente centró mal. Y lo que es el fútbo, de la sentencia al empate. Un desequilibrio en el centro de la defensa permite un pase a la espalda de Amrabat para Eraso que superó a Adán en el segundo intento tras el rechace del portero de Mejorada.

El empate dejó helado al Villamarín que solo se caldeó cuando se preparaba el cambio de Rubén Castro por Sergio León. Y el canario, tras un aviso a centro de Francis cuyo cabezazo se quedó corto y despejó un defensa, no falló a la segunda. De nuevo Francis centró al área pero esta vez Amrabat levantó excesivamente los brazos para golpear el balón dentro del área. Penalti cuando faltaba poco menos de 10 minutos para el final. Ni los intentos de Cuéllar por desestabilizar al delantero bético descentraron de lo que mejor sabe hacer el máximo goleador bético que marcó con sangre fría para llevar el delirio a la grada. Hasta el final, tocaba sufrir pero la grada andaba volcada con su equipo que cierra una buena primera vuelta a pesar del bache de juegos y resultados.

El Betis quiere luchar por entrar en Europa y sus dirigentes deben encargar de dar más herramientas a Setién en forma de fichajes, el técnico debe mejorar el rendimiento defensivo de sus jugadores y estos deben seguir creyendo y luchando cada partido, porque a la vuelta de la esquina viene el intratable F. C. Barcelona.