​El Castillo de las Guardas espera los resultados de una última prueba para recuperar el consumo humano del agua

El Ayuntamiento ya cuenta con dos muestras de agua con valores permitidos de trihalometanos, correspondientes al jueves y al viernes de la semana pasada

La localidad de El Castilo de las Guardas continúa con el agua de su red de suministro declarada como no apta para el consumo humano, al ser detectada días atrás una concentración de trihalometanos superior a los límites permitidos, si bien ya pesan dos análisis de muestras de agua que arrojan resultados por debajo de los citados límites y el Ayuntamiento está a la espera del resultado de una tercera prueba, decisiva para resolver la situación.

El alcalde de El Castillo de las Guardas, Gonzalo Domínguez Delgado, ha explicado a Europa Press que a día de hoy sigue pesando la mencionada declaración del agua corriente como no apta para el consumo humano, lo que significa que no debe ser ingerida ni utilizada para la elaboración de alimentos, aunque sí puede ser usada para la higiene personal y la limpieza doméstica.

La Consejería de Salud declaró no apta para el consumo humano el agua corriente de la localidad la semana pasada, recordémoslo, después de que entre finales de junio y el 8 de julio ya pesase una declaración similar, también por concentraciones de trihalometanos por encima de los valores permitidos.

Frente a este nuevo episodio las autoridades han dispuesto el suministro de 68.000 litros de agua embotellada para la población del municipio, señalando el alcalde que el Ayuntamiento ya cuenta con dos muestras de agua con valores permitidos de trihalometanos, correspondientes al jueves y al viernes de la semana pasada, pues la situación había sido detectada antes la declaración oficial de la Consejería de Salud, y está a la espera de los resultados de una tercera muestra recogida el pasado lunes.

Con los resultados de tres muestras consecutivas arrojando parámetros permitidos, según el alcalde, sería ya levantada la declaración de no apta para el consumo humano que pesa sobre el agua de la localidad. Exponiendo que el Ayuntamiento y la Diputación provincial están desplegando "muchos recursos" para corregir la situación suscitada en el abastecimiento de agua, el alcalde de ha mostrado así tan "optimista" como "cauto".

El Ayuntamiento y la Diputación, en ese sentido, prevén mejoras en la red de suministro, que bebe principalmente del embalse de La Reserva, actualmente en mínimos históricos, con obras en el embalse de Crispinejo para la aportación de agua adicional, la instalación de dosificación de permanganato potásico en los dos bombeos de agua en los dos embalses de los que se nutre el municipio o la construcción de una potabilizadora, entre otros aspectos.