Las víctimas de este grupo eran jóvenes que se encontraban en su camino a los que asaltaban esgrimiendo defensas extensibles y cuchillos, y les amenazaban con agredirles si no entregaban sus pertenencias.
Gracias a las grabaciones de vídeo disponibles, los agentes pudieron observar la descripción exacta de los individuos y, con esta información, se desplegó un operativo en la zona para tratar de localizarles.
El incendio, según el Ayuntamiento hispalense, se habría originado por una incidencia con un brasero, siendo detectado el foco de las llamas en el salón.