Ambos pediatras, de baja tras sufrir crisis de ansiedad, llegaron a recibir amenazas por parte de unos pacientes que arremetieron contra ellos exigiendo ser atendidos de inmediato sin cita previa.
La Junta alega que se trata de algo temporal debido a la baja de los profesionales por COVID, mientras que el ayuntamiento critica la la "falta de previsión"
Rafael Espino, del Valme con especialización en Endocrinología Pediátrica, junto a Cristóbal Coronel, del centro de salud 'Amante Laffón'.
Ante la variabilidad en su abordaje, corroboran la calidad en la praxis asistencial de este hospital tras un estudio epidemiológico.