La tradición de los dulces de convento lleva siglos viva en Sevilla y es que también elaboran mermeladas, confituras o productos más navideños como los cordiales o los naranjitos del convento Madre de Dios o las tortas de Santa Clara.
El menú de almuerzo sustituirá carnes, embutidos y fiambres por pescados, legumbres y verduras, mientras que las meriendas serán de dulces típicos como los pestiños o las torrijas, "contribuyendo a humanizar la estancia mediante las tradiciones gastronómicas"