La operación, denominada 'Semilla', se inició en el mes de enero, al detectar los agentes de la Unidad Operativa de Sevilla "movimientos sospechosos" de varios individuos en una nave del municipio.
Las cinco furgonetas estaban estacionadas en la vía pública en las zonas de Campo Alegre y Campo de las Beatas.
Uno de los arrestados, semiprofesional en el mundo del porno de menores y con antecedentes policiales por este tipo de hechos, se lucraba a través de un conocido chat on line con el envío de enlaces de material pornográfico.