Inmovilizados tres vehículos por intrusismo al transportar turistas

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Además un taxi ha sido inmovilizado al ser descubierto con la ITV caducada desde diciembre de 2017. 


Inmovilizados

Un conductor ha sido sancionado con 1.380 euros por el Ayuntamiento de Sevilla por intentar prestar un servicio de transporte de viajeros en el aeropuerto sin autorización alguna para ello, toda vez que un taxi ha sido inmovilizado al ser descubierto con la ITV caducada desde diciembre de 2017, siendo también inmovilizados los monovolúmenes de dos conductores que pretendían transportar turistas desde hoteles del centro a Granada y Ronda (Málaga), pese a carecer de licencia para ello.

Según ha informado el perfil oficial de los servicios de emergencia del Ayuntamiento de Sevilla en las redes sociales, recientemente se detectó en la terminal de salidas del aeropuerto un vecino de la capital que, con su turismo particular, "se disponía a recoger a un turista egipcio para prestar el servicio de transporte sin tener autorización para ello".

El servicio previamente acordado consistía en trasladarle hasta un hotel de la zona de Nervión, extremo que motivó que la Policía Local inmovilizase el vehículo e iniciase un procedimiento sancionador por una infracción grave a la normativa de transporte, mientras el turista egipcio era trasladado al hotel por un taxi.

Pasadas unas horas, según la Policía Local, el denunciado compareció aportando justificante de ingreso de la sanción, que alcanza los 1.380 euros, siendo levantada la inmovilización.

En el entorno de la estación de trenes de Santa Justa, de otro lado, "recientemente se inmovilizó un taxi de la capital por prestar el servicio teniendo la ITV caducada desde diciembre de 2017 y con el visado de la licencia municipal caducada desde junio de 2018".

Ya este mismo martes, en las inmediaciones del Hotel Inglaterra en la Plaza Nueva, los agentes de la Policía Local han detectado a un ciudadano chino que "se disponía a transportar a seis adultos y un menor hasta Granada a bordo de un monovolumen", toda vez que "horas más tarde, en las inmediaciones del hotel Alfonso XIII, otro conductor se disponía a trasladar a dos personas a Ronda (Málaga) a bordo de un monovolumen".

En ninguno de estos casos los conductores disponían de autorización para realizar el servicio, lo que motivó la inmovilización de los vehículos e inicio de los correspondientes procedimientos sancionadores.

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