​Andalucía aplicará la docencia online, mantendrá el calendario de exámenes y priorizará la evaluación continua en la etapa universitaria

|

Este es el acuerdo adoptado por Junta de Andalucía y universidades públicas de la región ante la crisis sanitaria del COVID-19, con el que pretende garantizar el mantenimiento de los niveles de calidad


Economía universidades

El consejero de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco, trasladado en la Conferencia General de Política Universitaria convocada por videoconferencia por el Ministerio de Universidades con el conjunto de las comunidades autónomas, que Andalucía mantendrá el calendario académico previsto y priorizará la docencia online y la evaluación continua en la etapa de educación superior, de acuerdo con las principales medidas recogidas en el acuerdo alcanzado por la Junta, las universidades públicas y la Dirección de Evaluación y Acreditación (DEVA) -como órgano externo de evaluación del sistema universitario andaluz-, ante la crisis sanitaria del COVID-19.

Velasco ha expuesto que el acuerdo alcanzado en Andalucía se sustenta en un documento marco compartido de principios para mantener la cohesión, solidez y calidad del sistema académico durante la excepcionalidad que marca el final del curso 2019-2020. Este texto establece como objetivo que, en este proceso de adaptación, el estudiantado pueda cursar las asignaturas en la que está matriculado y ser evaluado en las fechas previstas en el calendario académico, sin sufrir retrasos en la terminación del presente curso académico o tener que trasladar las asignaturas al próximo.

Tras ese consenso entre la Administración y las instituciones académicas, cada universidad debe aprobar sus criterios académicos de adaptación válidos para todas las titulaciones y elaborar adendas a las Guías Docentes con los cambios que se acuerden. Todos los ajustes en la metodología docente y métodos de evaluación han de ser comunicados a los estudiantes con la suficiente antelación, recomendándose como plazo finales de abril.


1.000 tarjetas para la docencia online

Por otro lado, las clases impartidas de manera online síncronas -en tiempo real- se adaptarán a los horarios en los que estaban previstas las clases presenciales. Cuando los medios tecnológicos lo permitan, se facilitará la grabación de las sesiones de docencia para que los estudiantes con dificultades para asistir en la hora programada puedan acceder a las clases grabadas.

Se velará por que las adaptaciones a la modalidad no presencial no excluyan a estudiantes que por falta de recursos tecnológicos tengan dificultades para el seguimiento de su formación a distancia. En este sentido, Velasco ha remarcado que desde la Consejería se ha llegado a un acuerdo con Vodafone para repartir 1.000 tarjetas SIM para la conexión de universitarios becados de las nueve instituciones académicas públicas (universidades de Almería, Cádiz, Córdoba, Huelva, Granada, Jaén, Málaga, Sevilla y Pablo de Olavide) que no tienen posibilidad o tienen dificultades de acceso a internet. Estas tarjetas SIM cuentan con una capacidad de 60 gigabytes al mes, durante dos meses.

Las tarjetas se han distribuido en proporción al número de estudiantes con beca del Ministerio o de las propias universidades con el umbral 1 de renta familiar. El mayor número de tarjetas (233) las recibirá la Universidad de Granada. La Universidad de Sevilla obtendrá 213; la de Málaga, 169; la de Cádiz, 111; la de Córdoba, 70; la de Jaén, 63; la de Almería, 52; la UPO, 45; y la de Huelva, 42.

Esta actuación no tendrá coste ni para las universidades ni para los alumnos y se enmarca dentro del programa de Bono Social con que Vodafone ayuda a colectivos en riesgo de brecha digital. Las universidades, que trabajan en la detección de alumnos que precisan estos dispositivos, serán las encargadas de repartir las tarjetas.

Para Velasco, “con esta medida, tanto la Consejería de Economía como las universidades, con la colaboración de Vodafone, han querido ofrecer una respuesta responsable, rápida y ágil para garantizar la continuidad de las actividades formativas mediante su adaptación a métodos no presenciales, manteniendo los estándares de calidad del sistema”.


Docencia práctica o experimental

Del mismo modo, la docencia práctica o experimental se adaptará a modalidades no presenciales, si bien en los casos donde ya hayan permitido alcanzar un volumen razonable de resultados de aprendizaje se podrá completar con otro tipo de actividades (proyectos, memorias, programas formativos, etc.) que puedan ser evaluadas.

En los casos excepcionales donde no sea posible la adaptación de la docencia práctica a una modalidad no presencial, se reprogramará la asignatura para ser impartida en el periodo en que las autoridades sanitarias permitan de nuevo la docencia presencial pudiendo impartirse en los meses de julio o septiembre de manera intensiva, si ello es posible.

Los métodos y criterios de evaluación que sustituyan a los previstos deben permitir valorar la adquisición de competencias y los resultados del aprendizaje de cada materia. Así, se priorizará la evaluación continua, incorporando alternativas de carácter no presencial tales como proyectos, participación en foros de debate, preguntas durante las sesiones, resolución de casos prácticos, informes, etc., en función de las características de las asignaturas.

Los estudiantes mantienen su derecho a la revisión de las calificaciones. La fecha y hora de la revisión así como los mecanismos para su realización serán anunciados por el profesorado al comunicar las calificaciones.

Prácticas externas curriculares

Siempre que sea posible, las prácticas externas curriculares se adecuarán a una modalidad no presencial mediante metodologías formativas alternativas o serán sustituidas por otras actividades que permitan adquirir las competencias correspondientes. El calendario y metodología deberán ser acordados con los tutores externos y quedar reflejado en la adenda de la Guía Docente.

En los casos donde no sea posible la adaptación de las prácticas a una modalidad no presencial, la universidad podrá prorrogar el periodo de realización por el mismo periodo en que se han visto suspendidas o reprogramar su realización cuando las autoridades sanitarias permitan de nuevo la docencia presencial. Si esto último es posible, se desarrollarán de manera intensiva en los meses de julio, agosto o septiembre, mediante acuerdo con la empresa/institución, salvo que el estudiante no pueda realizar las prácticas en dichas fechas por motivos debidamente justificados.

Si fuera necesario, las prácticas podrán prorrogarse o realizarse hasta final de año, siempre que lo permita la coordinación con las plazas de prácticas previstas para ese curso, para evitar solapamientos. En este último caso, no será necesaria una nueva matriculación del estudiante o si por exigencias administrativas lo fuera, no deberá abonar nueva matrícula.

Para las prácticas externas de larga duración de titulaciones profesionalizantes reguladas (Grados en Ciencias de la Salud y Ciencias de la Educación, Máster Universitario en Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas, Máster Universitario en Abogacía y Máster Universitario en Psicología General Clínica) son de especial interés las recomendaciones y acuerdos alcanzados por las conferencias nacionales de decanos, procurando las universidades andaluzas adoptar las soluciones propuestas por dichas conferencias, a fin de que las competencias adquiridas por los estudiantes sean similares en todo el territorio nacional.

Será posible, además, el reconocimiento como créditos de prácticas externas de desempeños profesionales excepcionales y de actividades de voluntariado que estén relacionadas con las competencias y resultados del aprendizaje que deban adquirirse en las prácticas externas.


Evaluación de TFG y TFM

El acuerdo entre la Consejería, las universidades y la DEVA establece que la defensa de los Trabajos Fin de Grado (TFG) y Trabajos Fin de Máster (TFM) se adaptará a la modalidad online, siguiendo los protocolos que aprueben las universidades. Se procurará, además, que se realicen en las fechas previstas. Si no fuera posible, se reprogramarían las fechas de defensa. Las comisiones de titulaciones de grado podrán adoptar la decisión de sustituir la defensa pública por la presentación de memorias escritas cuando existan dificultades técnicas para la composición a distancia de las comisiones de evaluación, salvo que exista normativa estatal reguladora del título que lo impida.

Los TFG y TFM experimentales o que requieran prácticas de campo se tratarán según los criterios establecidos para la realización de prácticas externas curriculares. Si las prácticas externas se han tenido que retrasar por la imposibilidad de su adaptación a la modalidad no presencial durante las fechas previstas, se permitirá que el estudiante pueda presentar el TFG o TFM aun sin tener superadas las prácticas, con los cambios transitorios en la normativa académica que ello requiera.

En cuanto a las tesis doctorales, las universidades aprobarán protocolos para la defensa no presencial en los casos en que no estuviese contemplado en su normativa, garantizando plenamente la identidad del doctorando y la publicidad del acto. Se deberá garantizar, igualmente, el plazo de exposición pública previsto en la normativa.

Las asignaturas o actividades formativas que no hayan podido adaptarse a una modalidad no presencial ni se hayan podido realizar durante los meses de julio o septiembre, aunque se desarrollen en los meses posteriores, se entenderán realizadas dentro del curso 2019/20, de manera que no será necesaria una nueva matriculación.

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.