Nace 'Cosmopolitia', un proyecto para apoyar el emprendimiento andaluz

Tres emprendedores andaluces han creado Cosmopolitia, un proyecto pionero a nivel mundial que, a través de un enfoque experiencial, persigue la creación de emprendedores, que incluye estancias de media duración en San Francisco, Shanghai, Düsseldorf y Berlín.

Cosmopolitia es un programa de un año de duración a través de 12 meses de experiencias vitales, cuyo objetivo no es propiamente formar a emprendedores sino más bien crearlos, a través de un “viaje de experiencias” orientado a cambiar la visión del mundo de los participantes.

Liderado por Francisco Ortiz, conocido y reconocido emprendedor y responsable de proyectos de referencia en el ámbito del emprendimiento como, entre otros, XTraice, la empresa fabricante de pistas de hielo ecológico con penetración en los cinco continentes, el programa propone “hacer del mundo y sus experiencias la mejor universidad que hayas podido imaginar jamás”.

Cosmopolitia propone a los jóvenes participantes tener la oportunidad de vivir 100 experiencias en un año, en 3 continentes distintos y en 4 países diferentes, pertenecientes a culturas tan contrapuestas como enriquecedoras. Estas experiencias abarcan desde la cotidianeidad de vida de los destinos elegidos hasta los avances más notables en esas sociedades. La cultura, las influencias religiosas y filosóficas, las razones de su desarrollo, el mundo de los negocios, el tejido empresarial y todo aquello que contribuye a adquirir una visión general de esos diferenciados países y ciudades son aspectos que tendrán cabida en el programa de experiencias.

Así, se contemplan, 24 experiencias en la Bahía de San Francisco, en el Silicon Valley, uno de los lugares del mundo donde se da mayor concentración de pequeñas empresas en formación (startups) y centro líder mundial para la innovación y el desarrollo de alta tecnología, que concentra un tercio del total de la inversión de capital riesgo en Estados Unidos; 24 experiencias en Shanghai, foco neurálgico de la economía china y del espectacular desarrollo del país; 24 experiencias entre Berlín y Düsseldorf; y por último, 24 experiencias en Sevilla.

En el caso de San Francisco, se plantea la experiencia de conocer a fondo el Silicon Valley, centro líder mundial para la innovación y desarrollo de alta tecnología, que concentra un tercio del total de la inversión de capital riesgo en Estados Unidos. Así, entre las actividades que se plantean se encuentran visitas durante una jornada a las instalaciones de Google, el gigante de Internet, o a las sedes de Twitter y Facebook, entre otras. En Berlín y Düsseldorf, durante un mes, los participantes analizarán las causas del liderazgo europeo de Alemania, con una disección de los elementos que construyen la personalidad del carácter germano, como el honor o el rigor, y con detención en aspectos como las relaciones laborales como base del Estado del Bienestar. Finalmente, en Shanghai, capital de China, se programarán experiencias para comprender el modelo chino de capitalismo, con visitas a espacios como Hangzhou, ciudad cuna de emprendedores, o la Bolsa de Shanghai, la segunda más importante del mundo.

Tras los tres primeros meses del programa en la fase dos, los participantes llevarán a cabo un ejercicio introspectivo en Sevilla. “Se trata –explica Paco Ortiz- de hacer el recorrido inverso. Si en la primera etapa, con esos tres destinos internacionales, viajamos hacia fuera, durante la segunda etapa se trata de reflexionar e interiorizar lo aprendido, así como de favorecer un mayor y mejor conocimiento de uno mismo”.

En la Experiencia 97 tendrá lugar el inicio del proyecto empresarial propio, volcando en él todo lo experimentado y aprendido. La Experiencia 98 es la de generación de la empresa y de defensa del negocio creado en dos semanas, sometiéndolo a pruebas de estrés empresarial. Identificados los retos a resolver para la concreción de los proyectos de empresa, las diferentes ideas recibirán la mentorización de especialistas en los aspectos más críticos de su negocio. Durante estas dos semanas los proyectos deberán definir y solventar las características y problemáticas clave que el lanzamiento de su empresa pueda entrañar. Los mentores darán indicaciones para el trabajo y el desarrollo de la idea al tiempo que reportarán feedback para controlar la evolución del proyecto. En la Experiencia 99, por fin, tendrá lugar la constitución de la empresa o negocio con la ayuda de asesores legales especializados, los cuales se encargarán de solventar los aspectos legales necesarios para la correcta constitución de la empresa en una semana. La Experiencia 100 será la definitiva, la de rodaje acelerado de la empresa en un entorno profesional, vivo, activo, dinámico y conectado, durante siete meses desde la constitución de la empresa. Este rodaje acelerado se producirá gracias al alojamiento de los participantes en un espacio de Coworking.

Los participantes estarán asistidos permanente por mentores que guiarán los primeros pasos de la empresa en aspectos tales como el desarrollo de su objeto social, el establecimiento de planes de mercado, la identificación de líneas de financiación o la toma de contacto con inversores privados, capital riesgo, business angels, etc.

En total, la duración del programa es de un año, y se desarrollará en grupos reducidos, de no más de 16 personas en cada curso. Está dirigido principalmente a jóvenes, de espectro y perfil diverso: desde universitarios y postgraduados hasta preuniversitarios, pasando por jóvenes con formación ocupacional o en activo pero con ganas de dar un nuevo rumbo a su vida profesional. “Es un programa –recalca Francisco Ortiz- abierto a cualquier parte del mundo. Es más, cuantas más nacionalidades haya, más rico resultará el proyecto”.

“Cosmopolitia –sostiene Ortiz- se concibe como un viaje de experiencias, hacia fuera y hacia dentro, buscando sacar a los jóvenes de su entorno geográfico tradicional pero sobre todo de su zona de confort. Queremos convertir a los participantes en ciudadanos del mundo, enriqueciendo sus horizontes vitales y haciéndoles personas más completas, con más perspectivas y mayor apertura hacia el mundo. Busca hacer empresarios. Y hacer empresarios no es formar personas que sepan montar una empresa. Ni formar personas instruidas en conocimientos vinculados a la gestión empresaria. Cosmopolitia va al núcleo, y el núcleo es la motivación y la pasión. La idea de negocio que en realidad es un proyecto de vida. Todo lo demás es reemplazable”, explica Francisco Ortiz.