​La seguridad al dormir, primera causa de preocupación en padres primerizos

La llegada de un nuevo integrante a la familia siempre causa muchos sentimientos, emociones y dudas en los progenitores sobre si serán o no buenos padres

Con el nacimiento de un bebé, los padres primerizos están muy alerta a cómo éste reacciona y se siente, principalmente en lo que a la seguridad de éstos al dormirse refiere. Este suele ser, sin duda, el momento más preocupante para ellos, debido al temor de que algo le pueda suceder al pequeño, situación que suele agudizarse si duerme en una habitación separada a la de los papás.

Este es un temor más común de lo que parece ya que, desde los primeros días de vida, la oscuridad de la noche, las pesadillas, el dormir solos, es algo que causa miedo, lo que hace patente la necesidad de proteger en todo momento a los hijos. Es por ello por lo que, antes del nacimiento, muchos padres toman medidas de seguridad que les garanticen saber que sus hijos estarán bien protegidos en todo momento.

Comodidad

Ya sea en una cuna tradicional, cama cuna o cuna de colecho, los padres primerizos deben asegurarse de que esta brinde comodidad necesaria al niño. De ahí radica la importancia de un colchón adecuado que además le brinde un descanso más placentero. Las cunas con colchones duros no son muy recomendables ya que podrían incomodar al bebé causándole problemas posturales e impidiendo que pueda dormir correctamente.

Así mismo, cuando se habla de cunas de madera, habrán de asegurarse que la separación entre las barras de protección sea la correcta para evitar que el niño introduzca su cabeza o se caiga pasando a través de ellos. Existen almohadillas protectoras que se pueden colocar a las barras para proteger al bebé en caso de dar una vuelta y chocar con éstos.

La asfixia al dormir es el temor más grande de los padres, por lo que muchos optan por eliminar las almohadas o colocar un colchón especial, como el colchón para niños Luly de BabyKeeper, con el fin de dificultar que un cambio de posición del pequeño pueda suponer un riesgo.

Seguridad tecnológica

El uso de altavoces para escuchar o monitores con vídeo para controlar en qué estado se encuentra el bebé mientras duerme es algo muy habitual, no solo en los padres primerizos, sino también entre los que ya tienen experiencia. Es una fórmula eficaz de comprobar rápidamente si el niño tiene algún problema y poder asistirle con lo que necesite para así poder evitarlo.

Es una alternativa, que a veces puede resultar también un poco costosa, que resulta muy buena opción para padres que duermen en cuartos diferentes a los del bebé, lo cual les permite estar más rejados mientras este duerme.

Espacio compartido

Algunos deciden tener al bebé dentro de la misma habitación conyugal hasta que el niño o la niña, tenga unos meses más de vida y cuente con un mayor control de sí mismo/a. Sin embargo, muchos especialistas aseguran que esto no es algo conveniente puesto que el bebé se acostumbra a estar cerca de los padres y a la hora de separarlo de la habitación tendrán problemas para que este se adecúe a dormir solo.

En conclusión, ser padres primerizos implica asumir un nuevo rol, por lo tanto, temores como éste son solo el principio de los muchos que irán surgiendo con el crecimiento de los niños. La vida es aprendizaje y la paternidad es una etapa más de la misma.