Comienza el montaje de los andamios previo a la restauración de la cara norte de la Giralda

La intervención, que superará los 800.000 euros de inversión, se sufraga "íntegramente" con la visita cultural y está previsto que se desarrolle durante un periodo de tiempo de unos diez a once meses

Este lunes 17 de abril ha comenzado el montaje de los andamios previo a la restauración de la cara norte de la Giralda. Esta intervención estaba programada con bastante antelación, pero el Cabildo Catedral de Sevilla "se vio obligado a detener su inicio debido a la crisis sanitaria" derivada del Covid-19 y se retoma ahora tras la Semana Santa, como se anunció el pasado mes de noviembre durante la presentación de la memoria de actividades de conservación y mantenimiento en el templo catedralicio entre los años 2017 y 2022.

Con estos trabajos se pretende culminar los iniciados en el año 2017 en la cara oeste de la Torre, que continuaron en años sucesivos en sus caras sur y este, tal como destaca la Catedral en un comunicado. De este modo, el Cabildo quiere culminar las cuatro caras de este "bien patrimonial único, símbolo de nuestra Archidiócesis y referente universal".

No obstante, esta intervención "no será la última en la Giralda", puesto que el Cabildo, dentro de su programa de mantenimiento preventivo, tiene también previsto actuar "tanto en el interior del monumento como en su remate renacentista".

La intervención, que superará los 800.000 euros de inversión, se sufraga "íntegramente" con la visita cultural y está previsto que se desarrolle durante un periodo de tiempo de unos diez a once meses. La actuación en la única fachada que quedaba pendiente tiene un coste más elevado que el resto puesto que se encuentra en "peor estado de conservación" y porque la intervención se llevará a cabo "teniendo en cuenta la experiencia de las anteriores y los conocimientos adquiridos en esos procesos", tal como señalaba el arquitecto-conservador de la Catedral, Jaime Navarro, en el citado acto.

En esta intervención se aprovechará, además, para revisar el sistema de sujeción de las campanas de la torre y acometer posibles reparaciones en el caso de que fuera necesario. Hasta la fecha, se han llevado a cabo en el monumento intervenciones esencialmente de "tipo epidérmico" y como resultado, se ha recuperado la policromía que se encontraba en avanzado deterioro.