Diez internos de la cárcel de Sevilla colocan los lazos del paso del Cristo del Amor

 Algunos de los internos que han participado en esta convivencia es la primera vez que salían a la calle, "siendo seleccionados por su buena conducta y por el nivel de implicación en los programas de reinserción". 

Un grupo de diez internos de régimen cerrado de la cárcel de Sevilla ha visitado la parroquia del Salvador, en el marco de una jornada de convivencia, para colocar la lacería del paso del Cristo del Amor con la leyenda 'Amor y Socorro a los encarcelados'. Se trata de un acto organizado por la corporación del Domingo de Ramos, que tiene por titulares al Cristo del Amor y Nuestra Señora del Socorro, "fiel a los piadosos fines que propiciaron la creación en el siglo XVI de esta Archicofradía".

Acompañados de cuatro funcionarios de Instituciones Penitenciarias y bajo la coordinación de Alfonso Lozano, los internos se han desplazado hasta la Colegial del Salvador en un microbús. Algunos de los internos que han participado en esta convivencia es la primera vez que salían a la calle, "siendo seleccionados por su buena conducta y por el nivel de implicación en los programas de reinserción", según informa la hermandad en un comunicado.

Ya en el interior el templo, los internos han realizado una ofrenda floral ante los sagrados titulares, han orado ante Ellos junto al director espiritual, Eloy Caracuel, y han colocando en el paso del Cristo del Amor las bandas de la lacería que portan en sus manos los cuatro ángeles de los costados con la leyenda 'Amor y Socorro a los encarcelados'. Acto en el que ha asistido el fiscal jefe de la Audiencia provincial de Sevilla, Luis Fernández.

Asimismo, los internos han podido disfrutar de la interpretación de una saeta a cargo de la saetera Cristina Galán con la misma letra que solían entonar los reclusos de la vieja cárcel del Pópulo de Sevilla.

Posteriormente, han compartido un ágape en las dependencias de la casa de hermandad con varios miembros de la junta de gobierno.

El objetivo de estos permisos de salida es que los internos "vayan retomando su contacto con la sociedad de manera progresiva y al mismo tiempo se atenúen los efectos nocivos del internamiento prolongado en prisión".