"Al 60%" las obras de mejora de la carretera Arahal-Morón para que estén listas tras el verano

La intervención implica ampliar la plataforma de la carretera, para que cuente con una calzada de siete metros, con dos carriles de 3,5 metros, uno por cada sentido, y arcenes de un metro. 

Las obras destinadas a mejorar la seguridad vial de la carretera autonómica A-8125, que conecta Arahal y Morón de la Frontera y marcada por las reivindicaciones ciudadanas a cuenta de su estado y su siniestralidad, alcanzan actualmente un grado de ejecución del 60 por ciento y la previsión es que concluyan "después del verano", según ha informado el director general de Infraestructuras de la Junta, Jesús Huertas, durante una visita a la actuación.

El proyecto, adjudicado a la empresa Construcciones Garrucho por unos 3,95 millones de euros, está cofinanciado al 80 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), para mejorar el trazado de esta vía comprendido entre los puntos kilométricos cero y 17.

El estado de la carretera A-8125 saltó al debate público en abril de 2014, a cuenta de un trágico accidente saldado con la muerte de una niña de tan sólo cinco años de edad, lo que intensificó las demandas en cuanto al arreglo de esta carretera por parte de una plataforma ciudadana y de los ayuntamientos de Arahal y Morón, gobernados entonces y ahora por Miguel Ángel Márquez (IU-CA) y Juan Manuel Rodríguez (PSOE), respectivamente.

Todos ellos solicitaban a la Junta el arreglo de la carretera dado su "lamentable" estado de conservación. Según los alcaldes, antes de la crisis mediaba un proyecto de reacondicionamiento integral de la carretera, si bien la actuación quedó congelada a cuenta de la asfixia económica de las administraciones.

AMPLIAR LA CARRETERA

Por eso, el proyecto promovido por la Consejería de Fomento parte de que esta carretera cuenta con una anchura de calzada insuficiente, no dispone de arcenes y el firme presenta "cierto desgaste debido al uso". Además, se identificó un problema de drenaje del asfalto, complicando la evacuación del agua de lluvia durante los temporales.

La intervención ya en marcha, así, implica ampliar la plataforma de la carretera, para que cuente con una calzada de siete metros, con dos carriles de 3,5 metros, uno por cada sentido, y arcenes de un metro. Esa ampliación permitirá suavizar las curvas para poder conseguir una mejora en los radios.

Asimismo, se prevé extender un nuevo firme, se está mejorando el drenaje entre los puntos kilométricos 3,4 y 6,4, donde se elevará la rasante peraltada en las curvas; y se están sustituyendo 21 obras de drenaje transversal que actualmente tienen una capacidad hidráulica insuficiente. La intervención culminará con la reposición de toda la señalización vertical, los sistemas de contención y balizamiento.

Además, se reducirán los tiempos de viaje, puesto que se pasará de una limitación de velocidad actual de 60 kilómetros/hora a otra de 80-90 kilómetros/hora, por lo que se ahorrarán unos seis minutos.

"Las intervenciones que se están realizando posibilitarán incrementar la seguridad vial y mejorar las condiciones de confortabilidad de la conducción, además se suavizarán las curvas", ha defendido Jesús Huertas.