El Sevilla se acostumbra a las remontadas

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Villarreal sevilla

En el ecuador de la segunda parte todo parecía perdido para el Sevilla. Precisamente un exsevillista había puesto el 2 a 0 tras un golazo en el estadio de La Cerámica. Pero nuevamente, en este caso con menos juego y más pegada, los de Nervión terminaron por imponerse en una nueva remontada. Esto es, de forma muy resumida, lo que ocurrió en este Villarreal 2 - Sevilla 0 y que tanto se parece a la fiesta vivida el pasado martes en el Sánchez Pizjuán.


Porque hay que decir que el Sevilla no jugó bien. El Villarreal, capitaneado por un gran Trigueros y con Bacca como referente, dominó gran parte del partido, tuvo las mejores ocasiones pero terminó perdiendo, principalmente por la impericia de su sistema defensivo y la calidad sevillista en momentos puntuales pero importantes.


Como suele ser habitual en semana de Champions, Berizzo rotó su alineación. Volvieron gente como Correa, Muriel o Franco Vazquez y mantuvo solo en el centro del campo a Pizarro. Aún así, el partido no comenzó bien. Tras escarceos cerca de ambas porterías, el Villarreal, aprovechando la poca intensidad sevillista, fue haciéndose con el control hasta ponerse por delante por obra de Bakambu, que se aprovechó de un centro raso de Fornals. Trigueros se multiplicaba ante un inoperante medio del campo sevillista que prácticamente no probó a Barbosa en toda la primera parte, solo un par de contras mal dirigidas hicieron temer a una entregada grada amarilla.


El Segundo tiempo no comenzó mucho mejor. De un saque de esquina a favor del Sevilla, el Villarreal montó una contra en la que Bacca dejó en evidencia a Carole y recorrió más de medio campo para batir a Sergio Rico tras diblarlo. Un auténtico golzao y un mazaz que parecía definitivo para el Sevilla. Más aún viendo que Soriano y el propio Baca pudieron hacer sangre en los siguientes minutos. Sin embargo, lo que es el fútbol, en una acción a balón parado, Lenglet acortó distancias y, sobre todo, metió miedo en un Villarreal que comenzaba a acusar el esfuerzo físico de la Europa League. No dio tiempo ni siquiera a dar sensación temerosa los locales ya que dos minutos después, un disparo desde la frontal de Mudo Vazquez, que incluyó un fallo de Barbosa, llevó el 2-2 al marcador.


Partido nuevo. El villarreal no era el mismo y el Sevilla tampoco se atrevía a dar el paso que requería el partido para apuntillar a su rival. Sin embargo, casi sin querer, una acción en banda de Mercado y Correa terminó con un inocente penalti, que significó además expulsión, de Víctor Ruiz. Banega hizo el 2-3 desde los once metros. Sólo quedaba que el Sevilla manejase la situación sin problemas cosa que no hizo del todo ya que Bakambu estuvo a punto de marcar con un remate de tijera y Bacca, en el descuento dio otro susto.


Triunfo importante del Sevilla ante un rival directo en una semana mágica llena de remontadas, que deja al equipo en quinta posición.

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