El Ayuntamiento decidía finalmente talar el ficus ya que "los técnicos municipales consideran que existe una gran incertidumbre sobre el estado de su anclaje por el estado de pudrición de las raíces y del cuello del tronco".
Los técnicos de Parques y Jardines, en cumplimiento del auto con medidas cautelares del pasado 18 de agosto, han practicado un riego "copioso" de toda la base permeable del ejemplar y puntos accesibles a sus estructuras radiculares cercanas.
El Ayuntamiento, por su parte, "dará cumplimiento inmediato" al auto de suspensión de la tala del ficus.
El consejo parroquial recuerda a los que "creen que ha habido despreocupación por parte de la propiedad" que ésta lleva "muchos años intentando buscar distintas soluciones a esta realidad".
En varios mensajes publicados en sus redes sociales, el primer edil ha remarcado que, en este caso, "la seguridad es prioritaria”.
Cuando este año acabe la citada campaña de repoblación, habrán sido plantados "5.100 árboles y 4.567 arbustos".
El servicio de Parques y Jardines procede a tres talas en la calle Sánchez Pizjuán ante la peligrosidad que entrañaban los árboles.
En total han desaparecido 620 ejemplares aunque ha anunciado nuevas plantaciones.