Este cerro que domina todo el municipio conserva aún lienzos de muralla de la antigua fortaleza, levantada durante el siglo XIII por los almohades con base tapial y ladrillo.
Se trata de elementos arquitectónicos del palacio primitivo del Alcázar fechados entre los siglos X y XI, fundamentales para una lectura completa de este conjunto monumental declarado Patrimonio Mundial.
El nuevo documento reformado del proyecto, según la Consejería, está además "apoyado por los informes de la intervención arqueológica y de los distintos estudios de patologías y análisis realizados”.
La Consejería de Justicia, Administración Local y Función Pública invertirá más de seis millones de euros de fondos europeos en esta actuación que cuenta ya con el visto bueno de la Comisión de Patrimonio
Otra muestra de la riqueza de este conjunto es la presencia de una serie de mosaicos que datan del siglo III de la era actual.
El diseño original pergeñado por el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra fue autorizado en 2015 por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico e incluso contaba con licencia de obras, si bien Adepa y otros colectivos conservacionistas lo tachaban de "crimen patrimonial".