El vehículo procedía de Bormujos cuando agentes de la Policía Local hicieron una inspección rutinaria de la documentación del vehículo y del conductor
El conductor pretendía llevar a siete miembros de una familia inglesa desde el aeropuerto hasta una casa rural en Fuenteheridos (Huelva), un servicio por el que recibiría 120 euros
El vehículo quedó inmovilizado y fue denunciado por la policía al mismo tiempo que los turistas fueron trasladados en otro taxi.
Los taxis están obligados a pasar una inspección anual para comprobar que cumplen con todos los requisitos.