Hasta la fecha se han tratado más de 2.500 pinos con diversas técnicas para prevenir la proliferación de esta oruga, cuyo contacto puede provocar reacciones alérgicas en personas y animales.
El fuego se dio por controlado el sábado, aunque se ha tenido que seguir trabajando para poder sofocar plenamente las llamas en este paraje densamente poblado de pinos y matorral.
La Junta de Andalucía ha informado de que parte de los pinos que se retiraron la pasada primavera han sido repuestos.