Sevilla contará con una estrategia a seis años para generalizar el reciclaje y la recogida selectiva de residuos

|

Plan reciclaje sevillaEl Ayuntamiento de Sevilla, a través de la empresa pública de limpieza, Lipasam, y en coordinación con distintas áreas municipales, ha diseñado para su puesta en marcha una estrategia con un horizonte de seis años para generalizar el reciclaje y la recogida selectiva de residuos en la ciudad. Se trata del Programa de Prevención y Gestión de Residuos de Sevilla 2018-2023, cuyo objetivo principal es orientar las actuaciones que se realicen en materia de gestión de residuos municipales en este periodo para afrontar los importantes retos que emanan de la normativa europea, en particular sobre reutilización y reciclado de residuos.

La delegada de Economía, Comercio y Relaciones Institucionales y presidenta de Lipasam, Carmen Castreño, junto a la gerente de esta empresa municipal, Virginia Pividal, han presentado hoy el borrador de este programa, cuya elaboración ha estado precedida de un amplio programa de participación pública a través de la plataforma Decide Sevilla, jornadas en la Universidad y carpas informativas, lo que permitió conocer la opinión y recabar propuestas de casi un millar de personas. Con esa base, se elaboró un documento que el pasado mes de julio se presentó en el Consejo de Participación de la Agencia de la Energía de Sevilla con el objetivo de abrir una siguiente fase de participación recabando opiniones y propuestas a un documento ya presentado.

Así, la delegada ha recordado “el parón que Sevilla sufrió en el anterior mandato en cuanto a la recogida selectiva, con la parálisis de todas las acciones e iniciativas para avanzar en una línea tan importante para la ciudad”. “A lo largo de este mandato hemos revertido la tendencia con un aumento de las cifras de recogida selectiva; el refuerzo de las acciones de concienciación y sensibilización; la implantación de nuevas líneas como la recogida de biorresiduos; el desarrollo de acciones para aumentar la recogida de vidrios y envases en los establecimientos en colaboración con las asociaciones; y el incremento de las isletas para la recogida selectiva”.


PAQUETE DE 60 MEDIDAS

“Nos hemos propuesto en esta estrategia una serie de objetivos y, para conseguirlo, hay un paquete inicial de más de 60 medidas que se van a enriquecer y a ampliar con las propuestas que se vayan realizando a esta primera propuesta de documento sobre el que ya están trabajando distintas asociaciones y grupos políticos”, ha explicado Castreño, quien, además, ha enmarcado esta estrategia en el Plan de Acción por el Clima y la Energía Sostenibles de Sevilla (PACES), puesto en marcha en este mandato, y en “el compromiso de la ciudad con la recogida selectiva, teniendo en cuenta que se sumó a la firma de Declaración de París contra el cambio climático y que suscribió la Declaración de Sevilla por la Economía Circular”.

Entre los principales objetivos de este programa están, entre otros, los de reducir la generación de residuos municipales; potenciar la recogida selectiva (en particular, la de bioresiduos) y reducir la cantidad que se recogen mezclados; optimizar los sistemas de recogida municipales; el aprovechamiento de los recursos contenidos en los residuos, de acuerdo con la jerarquía de gestión de la UE; reducir los residuos que se destinan a eliminación; sensibilizar a la ciudadanía sobre la importancia de la adecuada separación de los distintos residuos; complementar las infraestructuras de recogida, incluyendo la red de puntos limpios; mejorar en los instrumentos de transparencia en materia de residuos; y apostar por la innovación y la colaboración público-privada.

Con estas líneas, se pretende alcanzar unos objetivos ambiciosos para los próximos 6 años como son implantar completamente en la ciudad la recogida selectiva de biorresiduos antes del 31 de diciembre de 2023; la preparación para la reutilización y el reciclado de como mínimo el 55% de los residuos municipales (en estos momentos está en más del 20%) antes de 2025; el reciclado de, como mínimo, el 65% de los residuos de envases antes de 2025; y, por último, el depósito de un máximo del 10% de residuos municipales en vertedero antes de 2035.


CONCIENCIACIÓN Y SENSIBILIZACIÓN

Para conseguirlo, la gerente de Lipasam, Virginia Pividal, ha detallado que se pone en marcha un paquete inicial de más de 60 medidas entre las que destacan las relacionadas con la recogida selectiva de materia orgánica, las mejoras en la recogida selectiva de envases ligeros, papel-cartón y vidrio y de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, muebles y enseres, así como en la colocación de contenedores y en las propias instalaciones de Lipasam. “Todas las actuaciones previstas van acompañadas de campañas de concienciación y sensibilización, algo que es clave para lograr que esta estrategia que ponemos en marcha tenga éxito”.

Respecto a la materia orgánica, destaca la puesta en marcha de campañas para evitar el desperdicio de alimentos, el fomento del autocompostaje y de su recogida selectiva entre grandes generadores, en zonas en las que está implantada la recogida neumática, en puntos del Casco Antiguo —recientemente implantada— y la implantación del quinto contenedor con tarjeta de acceso, prevista inicialmente en Sevilla Este, Bermejales, Triana y Los Remedios.

En cuanto a las mejoras en la recogida selectiva de envases ligeros, papel-cartón y vidrio, se contemplan medidas para la extensión gradual de contenedores de con sistema anti-intrusión (en el caso del papel/cartón); la ampliación de la instalación de sensores de llenado en contenedores de vidrio; el refuerzo de la recogida selectiva en hoteles, establecimientos hosteleros, comerciales y parques empresariales; y, por último, el refuerzo en la celebración de eventos.

En lo que se refiere a la colocación de contenedores y a la mejora de las propias instalaciones de Lipasam, está prevista la ampliación la capacidad de contenedores soterrados existentes; el paso progresivo de los contenedores de carga trasera y doble gancho existentes a sistemas automatizados (con mayor capacidad, menor tiempo de recogida, menor impacto visual, etc); la puesta en marcha de un nuevo punto limpio para dar cobertura a la zona sur-oeste y de, al menos, un ecopunto por distrito antes de final de año.

Para los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, muebles y enseres, entre las medidas iniciales se incluye el fomento de iniciativas para su reparación o reutilización, preferentemente en el ámbito de la economía social, y la adaptación de los puntos limpios a la nueva normativa sobre la recogida de aparatos eléctricos y electrónicos.

Además de todas estas medidas, también se contempla estudiar desde el punto de vista técnico, económico y jurídico los pasos necesarios para la implantación del sistema de pago por generación y potenciar la información ambiental y la transparencia en materia de residuos. 

Sin comentarios

Escribe tu comentario




No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.